Gracias a Rocio, mi gatito persa Sancho se está recuperando de una insuficiencia renal muy grave. El año pasado pensé que lo perdía, después de estar ingresado en varios centros de urgencia Rocio se lo llevo a la clínica , y por fin le diagnosticó el problema renal. Le puso un tratamiento y un año después, está fantástico, con una analítica muchísimo mejor, ya casi normal. Se que es una enfermedad crónica y hay que seguir luchando, pero siempre me acordaré de lo que me dijo Roció cuando me sentía tan desesperada porque Sancho no comía : “lo único que se puede hacer es darle mucho amor”